Ante el por lo menos desfachatado comunicado de FALABELLA publicado en Rosario/12 el día 15 de mayo, realizamos las siguientes precisiones:

1) Es falso que FALABELLA “repudie” los hechos como pretende hacer creer, cuando a quienes sí lo hicieron en el preciso instante en que ocurrían se los patoteó por medio del personal de seguridad.

2) Es falso que lo ocurrido sea un “lamentable incidente”. Es un delito y punto.

3) Es por lo menos un cinismo decir que el “personal de seguridad...tiene expresamente prohibido la portación y/o uso de cualquier tipo de elemento disuasivo por medio de la violencia física”, ya que, a) en primer lugar, no hubo “disuasión” de nada porque no había nadie a quien “disuadir” de nada, y la sola formulación tal como está indica que FALABELLA, aún en medio del supuesto “repudio” sigue sosteniendo que los niños provocaron vaya a saber qué cosa digna de ser reprimida por sus mercenarios; y b) porque en este contexto esta expresión suena a una ironía de su soberbia, ya que el ataque a nuestros pibes fue “por medios” químicos. 

4) Es falso que, como dice el comunicado, FALABELLA “advirtió a Servicios Interactivos de Argentina SA de los hechos ocurridos”, toda vez que el personal de esa empresa fue quién los cometió y obviamente no necesitaba ninguna “advertencia” y sin embargo el personal continuó en su puesto como si nada hubiese pasado.


5) Es falso que FALABELLA “puso a disposición de la Justicia la nómina completa del personal de seguridad” como si hubiese querido colaborar con ella. Si mandó algo, los abogados de la UADH lo están constatando, como también que la nómina sea “completa”. Por otra parte, si así resultara, no es por iniciativa de esa empresa, sino a requerimiento de los funcionarios y con la consabida demora.

6) Que el personal haya “obrado en contra de las disposiciones de la empresa” y que FALABELLA S.A. “no comparte” su actitud, es algo que se deberá probar de alguna manera creíble, porque hasta ahora todo indica lo contrario. De lo que estamos seguros es que es objetivamente responsable de lo sucedido.

7) Es falso que “los valores de la empresa son contrarios a todo tipo de discriminación”. Precisamente denunciamos que el día 5 de mayo del corriente año, es decir menos de una semana antes del ataque a los niños rosarinos, FALABELLA fue objeto de una protesta llevada a cabo frente a varios de sus locales en Perú, impulsado por organismos de Derechos Humanos precisamente por la tendencia racista y discriminatoria que la empresa despliega a través de su publicidad (La Nación, Santiago de Chile y otros medios). De allí que su “solidaridad” con las “familias de los niños que protagonizaron este penoso episodio” suena a lo que es: una burla más a la dignidad de quienes sienten en carne propia la ofensa de FALABELLA.
Es importante resaltar algo de la perversidad de los escribas de FALABELLA: nuestros niños no “protagonizaron ningún penoso incidente”, nuestros niños han sido víctimas de un delito cometido por bestias a las órdenes de FALABELLA.

8) Es imprescindible aclarar que eso de que “FALABELLA está a disposición de la Justicia” es una sobreabundancia prepotente propia de quienes han disfrutado del régimen pinochetista. Seguro que FALABELLA está a disposición de la Justicia y más que eso, son los hechos los que la ponen a disposición de la misma, pero no sólo eso: la ponen en condiciones de tener que rendir cuentas ante todo aquel que quiera reclamarle por su conducta tantas veces como crea necesario para poner límite a la bestialidad de esa empresa. Ahora bien: es el colmo que diga que lo hace para “colaborar”. Según lo indican las circunstancias FALABELLA va a tener que responder ante la Justicia, lo que está muy lejos de lo que quieren hacer aparecer como una concesión.



- NO OLVIDAMOS

- NO PERDONAMOS

- NO NOS RECONCILIAMOS

Lunes 21, 19 horas, local de la UADH, reunión organizativa del acto de repudio a FALABELLA convocada por numerosas organizaciones y los representantes de la Comunidad Toba atacada.