TITO ES TITO.

Si la información es de interés general –y la detención de Sfulcini pareciera serlo toda vez que es nota de tapa con gran fotografía- la precisión de la misma es una cuestión de cuidado. No se trata de “enmendarle la plana” a alguien por pura ocurrencia, sino de señalar que determinadas inexactitudes no hacen justicia a los que luchan día a día contra la impunidad. Toda negación de estos esfuerzos por la vía que se produjeran, menoscaban la misma lucha.

1. La nota informa que  “La causa judicial por la desaparición y muerte de Roberto Tito Messiez ya tiene un detenido: Carlos Sfulcini…”

Amén de otro grueso error que señalaremos más adelante, al momento de publicarse, es decir el sábado 8 de noviembre, los imputados detenidos en la causa en realidad  eran dos, ya que anteriormente, después de una impaciente tarea en Tribunales y en la investigación que duró meses, (pedimos su detención el 20 de setiembre de 2007) se ordenó la prisión el 28 de febrero de 2008 del Coronel JULIÁN GAZZARI BARROSO, personaje siniestro  que se encontraba “prófugo” en otras causas  nada menos que desde el 2005.

De esta labor de la querella dan cuenta los escritos presentados que pueden ver en el siguien te enlace: Escrito de insistencia pidiendo la detención de Gazzari Barroso. Además, declararon respecto a este punto en concreto los periodistas Coco Lopez (por el conocimiento que tuvo de las gestiones realizadas cuando Tito fue secuestrado) y Carlitos Del Frade (autor de una investigación muy precisa y actualizada que contribuyó al desarrollo de la causa).
En resumen no es cierto eso de que  “La causa….ya tiene un detenido…”. En realidad ya lo tenía y esto fue producto de un enorme esfuerzo de la querella, que como en casi todos  los casos, tiene prácticamente  la carga de la investigación si es que se quiere obtener algún resultado.

Pero al respecto debe aclararse algo: en el día de la fecha se nos ha informado que Gazzari Barroso murió impune, lo que ciertamente es una injusticia. A la vez mañana viernes 14 de noviembre, Ariel Zenón  Porra “alias” el Puma, también imputado por la desaparición de TITO, quedará seguramente detenido en esta causa luego del cumplimiento de la indagatoria prevista a las 9 Hs, para lo cual será trasladado desde la U2 de Villa Devoto.
Su cómplice de la patota Carlos Sfulcini, en tanto, se encuentra en la sede local de la Policía Federal,  calle 9 de julio 233 de Rosario.

1. En relación a las declaraciones del represor Tucu Costanzo, el trámite de su testimonial  tampoco fue fácil como podría deducirse del texto de la nota.

En realidad, a la nota de LT8 y Rosario/12 que se alude, poco y nada de importancia se le dio en el Tribunal Federal, pese a que su difusión fue potenciada incluso por la UADH a través de miles de correos, de la página web y de la solidaridad de muchos organismos y organizaciones y con sus recursos de comunicación.
La prueba está en que a la querella le llevó 37 días lograr su comparencia ante la justicia y de esto también dan cuenta los documentos publicados por la UADH:

- Testimonial del Represor Eduardo "Tucu" Constanzo

- Llamado a declaración de Constanzo


- Audios de las declaraciones del "Tucu Constazo"


- Presentacion ante la justicia por las declaraciones del "Tucu Constanzo"


Se trabajó prácticamente a destajo durante la misma feria judicial para lograr que recién el 18 de febrero lo hicieran comparecer.
No fueron la mera publicidad de su soberbia desfachatada la que lo llevó a esa instancia, sino la insistencia obstinada de la querella, profesionales y militantes de la UADH. Sin esa judicialización, nada hubiera podido concretarse por más útiles que parecieran.

2. Respecto a esta cuestión se podría coincidir en que “Pero su suerte comenzó a cambiar el 11 de enero de este año cuando Eduardo "Tucu" Costanzo, lo señaló en una entrevista que publicó Rosario/12 como uno de los represores que identificó a Messiez en una fotocopiadora de Entre Ríos y Córdoba y que lo detuvo para luego llevarlo a La Calamita donde lo torturaron”. Pero lo cierto es que para que la suerte de Sfulcini cambiara faltaba mucho más que eso, tanto que incluso, habiendo pedido inmediatamente su detención y las de  Bueno, Cabrera y Porra, el Juez negó esa medida, la querella interpuso recurso ante el mismo y finalmente introdujo un recurso de insistencia (lo que también hizo la Unidad de Asistencia para Causas por Violaciones a los Derechos Humanos durante Terrorismo de Estado) y recién el 4 de noviembre se obtuvo la  resolución del Juez. Esto es, después de NUEVE MESES de batallar para ello.

Es por lo menos una actitud despreciativa de la silente pero incesante tarea de la querella y los compañeros, pasar por alto semejantes circunstancias. Entre aquellas declaraciones mediáticas del 11 de enero de 2008 y hoy, pasaron cientos de días y miles de horas de desvelo, esfuerzo, bronca, impotencia, insistencia, trabajo paciente y corazón impaciente.
No despreciamos la información, porque nosotros mismos nos brindamos diariamente a ella; pero los resultados judiciales se obtienen en los ámbitos judiciales, las causas judiciales se pelean en las oficinas judiciales, y las condenas judiciales se obtienen en los estrados judiciales. No se obtienen condenas en una nota de un suplemento de un diario, por importante que este sea o se pretenda.

Y aclaramos: jamás negamos información al respecto y la actividad en la causa es permanentemente dada a la luz pública por correos y en nuestra página: http://www.uadh.org

3. Sobre esta misma cuestión debemos referir algo sustancial. La nota de Rosario/12 dice: “Esa declaración que Costanzo ratificó luego ante la justicia,…”.

En realidad se rectificó y no en poca cosa. Atribuyó a confusiones del periodismo decir que él acusaba a Walter Salvador  Pagano de participar en el secuestro de Tito.
Y claramente decimos que es así porque sería absolutamente inconducente y peligroso que siguiéramos una senda que no es la que debemos usar. Si nos hubiéramos dedicado a la persecución de Pagano en este caso –como sí lo hemos  hecho con Gazzari Barroso o “El Barba” Juan Andrés Cabrera- hubiera sido una desviación de las tantas que nos tienden los  servicios con su información envenenada y se agregan a los reparos que se plantean en el mismo Tribunal. Porque nadie debe desconocer que en torno a estos juicios se tejen madejas de complicidades que van desde el ocultamiento de información y elementos útiles hasta la tentación con información falsa.

4. Queremos dejar constancia reiterada que son cuatro las detenciones ordenadas actualmente  por el Juez: Cabrera, Porra, Bueno y Sfulcini. Porra ya está preso en otras causas, Bueno y Cabrera tienen sobre sí una búsqueda ordenada y Sfulcini pudo ser detenido, tal como informáramos el 7 de noviembre por la red de correos, medios alternativos y nuestra página web.


5. Otro punto importante debemos aclarar: los escraches  a Sfulcini. Lo recalcamos en negrita porque no se trata de un escrache en el año 2000 ( Ver Convocatoria para escrache del 02/08/00 ) sino de algo mucho más cercano en el tiempo y directamente ligado en la calle a nuestra tarea en Tribunales. Una parte indisoluble que se sintetiza en la conocida consigna SI NO HAY JUSTICIA HAY ESCRACHE. Y así fue que, con la consecuencia que muy pocos organismos han sabido conservar en estas épocas de “cooptaciones”, de compra y venta de historia de lucha que se tira a la basura de un presente de acomodos y trepadas, hemos concretado el último 24 de marzo en homenaje a nuestro 30.000 y repudio a la dictadura otro escrache a Sfulcini ( Ver Escrache al Represor Carlos Sfulcini 24/03/08 ). También en esta ocasión el genocida hizo su escrito público, recibimos amenazas y sufrimos la acción de sus cómplices que incluso salieron a arruinar los carteles de denuncia y convocatoria (ver informe con fotos). El periodista sufrió una súbita desmemoria al momento de “armar” una pobre y confusa nota sobre tema tan importante y de esa manera manipuló de nuevo parte de la verdad, lo que en buen romance, es una de las peores de las mentiras.

Por último queremos señalar un torpe error que exhibe Rosario/12 en su tapa. Allí dice:

“La causa judicial por la desaparición y muerte de Roberto "Tito" Messiez ya tiene un detenido”

El caso es que Tito, nuestro querido Tito, no se llama Roberto, sino Rubén.
Si no se lo tiene con precisión, para un profesional, es muy fácil apelar al archivo de compañeros desaparecidos.
Es tan simple respetar siquiera el detalle de saber y decir con cierto recato y cierta emoción el nombre de un compañero.
Cuando se trata de precisar, alcanza con la humildad comprometida de preguntar lo que no se sabe, de acercarse a las fuentes si algo se ignora.
Pero si no es  así, basta admitir, como muchos compañeros de ayer y muchos más militantes y gente honesta de hoy, que no importa para recordarlo un nombre preciso, sino sólo saber que se trata de TITO. Nada más ni nada menos que TITO.
De todos modos es lamentable que para la holgura de un “profesional” presumido sea “Roberto” y que el negocio que con esta noticia se hace lleve a tal desprecio de la preciosa materia memorial con que se trabaja.
Y bien, se deberá tomar como de quien viene. Pero los que ponemos alma y vida en esto, los que queremos, respetamos y seguimos el ejemplo de TITO nunca confundiríamos su verdadero nombre.

NO OLVIDAMOS - NO PERDONAMOS - NO NOS RECONCILIAMOS